“Amor impasible”
Amor no es amar lo que cambia
¡Oh no! Es un tatuaje indeleble
Que acecha las tempestades firmemente.
¿Acaso no debería amarla a pesar de sus ligerezas y locura? Amarla por el cariño que me tiene, no es amarla a ella, sino a mí mismo. Me ha robado de sí. ¿Robará mi amor por ella? ¿Acaso no viví en su sonrisa? ¿Es menos dulce ahora que no la tengo? ¿No adoré cada gracia suya? ¿Acaso con menos encanto se curva porque ha preferido a alguien que no soy yo? ¿Está mi amor acaso en el poder del azar o de su capricho? No, lo conservaré en su pureza, y ella será una Diosa y edificaré un templo en su honor en mi corazón y la adoraré en altares indestructibles, y levantaré estatuas con su efigie, y mi homenaje será ennoblecido en su excepcional simetría; y cuando eso falle, su memoria sobrevivirá, y mi pecho será resistente al desdén como el suyo lo ha sido a la piedad, y mi amor implacable la perseguirá y rogaré ser su esclavo y vigilar oculto sus pasos sin esperar recompensa, y servirle mientras viva y llorarle cuando muera. Y así mi amor se revelará superior a su desprecio, y habré vencido y luego moriré. ¡Ésta es mi idea del verdadero y único amor heroico! Tal es mi amor por ella.
Por Julián Guía
