Poemas de [Contra] Dicción, de Luis Armenta Malpica

LA CURVA DEL OLVIDO

No miramos el mundo hasta cerrar los ojos:

lo demás es recuerdo.

 

Uno de mis recuerdos infantiles

es que yo era un caballo: andaba

en el jardín y me comía

las hojas de los tréboles. El césped

no alcanzaba para jugar futbol

ni para el trote. El sabor a limón o anís

se fue mezclando con otros destilados. Los hombres

sus barricas de cuero

me perseguían desde antes de sostener

el vaso. Con los golpes del hielo

enfrié la sed que ya traía

mi lengua: destino insospechado

que cubría el uniforme. Medio de contención

propinaba patadas sin atajar un tiro. La defensa

indefensa que no faltó al partido

mientras se acompañase del portero

desde entonces un crack

mientras yo me hice polvo. Blanco

de las miradas en uniforme oscuro

y manga larga. Liverpool fue el equipo

que jugó los domingos. Entrenamiento diario

que no me hizo mejor

sino más fuerte. La curva del olvido

fue un relámpago. Un crack en la rodilla

un bang sobre la lengua

y esta voz relinchando

sobre una cancha extraña. Rejas

de cal entonces. Hoy de hierro

oxidado

es el sabor a sangre

que destila

sin vaso de por medio

y sin defensa alguna.

 

a Rubén Cruz

UN PUENTE [MUSICAL]

…con limpia curva, nuestros ojos se apartan.

Hart Crane

 

Saltas del Orizaba

al líquido brillante de las venas

y tu voz es el puente

que se mantiene firme después

del ahogamiento. Andamiaje

de aquellos sin una casa cerca. Ya no leo

en tu mirar la despedida. El eficiente barro

la hierba previsible

no están para cubrir la torre que permanece rota

sobre Brooklyn. Ni Walt, ni Jeff Buckley, ni tú

beben del Misisipi el valle

más remoto. Cabalgaron sus ojos

el relámpago. No se tocaron

nunca. La curva de ese puente

no llegaba a sus caras. Eran sólo

reflejo de otra luz y otro

tiempo. Saltaste

—clavado que ensayaste mil veces—

para escapar del miedo que vistió de marino.

Del deseo galvotérmico. De su óxido

de piel. En el borde

del agua dejaste tu recuerdo

—la práctica suicida—. No hay

sombra de cordaje en el arcoíris que termina

en la Atlántida. Cumpliste

tu misión al ascender el puente del fracaso celeste

y descender el túnel de tus nuevas palabras.

 

No te aparto de mí, cáliz

y limo, al levantar mis ojos

e intentar dar un salto

inocuo hacia los tuyos.

 

a Jorge Humberto Chávez

 

De [Contra] Dicción, Premio Iberoamericano de Poesía Minerva Margarita Villarreal 2021

Written by La Mascarada

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